Recordamos la importancia del color de las botellas. Según la actual legislación, la ojiva debe ir pintada a cuarterones blanco y negro, el color del cuerpo NO DEBE DE SER BLANCO, ya que está reservado para gases medicinales. Generalmente las botellas deben de ir de color amarillo para favorecer una mejor visibilidad.
Un trabajo de pintura puede ser, a primera vista, un trabajo de poca especialización. Pero lo cierto es que, si se quiere disfrutar de un trabajo de calidad y que sea duradero en el tiempo, es imprescindible contar con pintores profesionales que tengan la experiencia y cualificación necesaria. Un pintor no profesional puede ofrecer un acabado problemático (grietas y burbujas que aparecen al cabo de un tiempo, desconchones frecuentes, etc.). Y posiblemente no ofrezca ningún tipo de garantía, aunque lo prometa.